Mirad este vídeo.
Seguro que lo habéis visto entero, sí xD. Los primeros 7 minutos y 41 segundos transcurren con normalidad, con sus bromas y tal. ¿Pero qué se ve diferente a partir del minuto 7:42?
ANTES
DESPUÉS
Aparte de Jose (el de en medio) en la imagen de "antes", claro, él se va antes del porrazo a telecinco.
¿Más de cerca para que se vea mejor?
ANTES
DESPUÉS
Y además a partir del minuto 10:19 todo vuelve a ser como antes del 7:20.
Supongo que no hace falta que explique el fallo.
__________________________________________________________
A otra cosa, que por lo visto el 2009 se acaba mañana, y entra el 2010. A quien le haya ido mal el año esperará que el 2010 sea mejor, y a quien le haya ido bien estara acojonado porque a lo mejor este año le puede ir mal.
Es curioso lo que provocan el Corte Inglés, la televisión, y demás empresas, que hacen (incluso a mí) que sientas un gran cambio entre un 31 de diciembre y un 1 de enero, que te propongas llevar a cabo propósitos (llamados como no, propósitos de año nuevo), que te reúnas con tu familia...
Si total, no hay diferencia alguna entre lo que pueda ocurrir en el planeta Tierra entre el 31 de diciembre y el 1 de enero que entre, por ejemplo, el 12 y 13 de julio.
Propongo que a partir de ahora los 12 de julio tambien haya propósitos.
Es más, mi propósito de año nuevo de este año será tener propósitos el 12 de julio.
Y así entro en mi primer bucle del 2010.
A mí personalmente me ha gustado este año. Quizás más la segunda mitad. Quizás. También es que es lo que tengo más reciente y me acuerdo más. Algunas cosas se han cerrado ya, algunos hechos o anécdotas que te hacen avanzar en lo que para abreviar (no léxicamente) se llama camino, se han convertido en recuerdos, algo muy necesario para la vida.
Otros siguen abiertos, porque como digo, el 31 de diciembre es una fecha aleatoria, nada cambia.
Así que para este 2010, con dos cojones bien gordos, y con la cabeza bien alta, a seguir pa alante, que lo que tenga que venir vendrá, y lo que tenga que irse se irá.
Y como no, concluir con algo nunca visto, dando las gracias a los que han estado ahí en algún momento (incluídas las tortuguitas), porque entre todos (donde me incluyo a mí mismo, porque sin fuerza de voluntad y coraje no vas a ninguna parte) sigo viviendo.
Felices fiestas, y recordad, nos vemos el 13 de julio.
Aparte de Jose (el de en medio) en la imagen de "antes", claro, él se va antes del porrazo a telecinco.
¿Más de cerca para que se vea mejor?
ANTES
DESPUÉS
Y además a partir del minuto 10:19 todo vuelve a ser como antes del 7:20.
Supongo que no hace falta que explique el fallo.
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A otra cosa, que por lo visto el 2009 se acaba mañana, y entra el 2010. A quien le haya ido mal el año esperará que el 2010 sea mejor, y a quien le haya ido bien estara acojonado porque a lo mejor este año le puede ir mal.
Es curioso lo que provocan el Corte Inglés, la televisión, y demás empresas, que hacen (incluso a mí) que sientas un gran cambio entre un 31 de diciembre y un 1 de enero, que te propongas llevar a cabo propósitos (llamados como no, propósitos de año nuevo), que te reúnas con tu familia...
Si total, no hay diferencia alguna entre lo que pueda ocurrir en el planeta Tierra entre el 31 de diciembre y el 1 de enero que entre, por ejemplo, el 12 y 13 de julio.
Propongo que a partir de ahora los 12 de julio tambien haya propósitos.
Es más, mi propósito de año nuevo de este año será tener propósitos el 12 de julio.
Y así entro en mi primer bucle del 2010.
A mí personalmente me ha gustado este año. Quizás más la segunda mitad. Quizás. También es que es lo que tengo más reciente y me acuerdo más. Algunas cosas se han cerrado ya, algunos hechos o anécdotas que te hacen avanzar en lo que para abreviar (no léxicamente) se llama camino, se han convertido en recuerdos, algo muy necesario para la vida.
Otros siguen abiertos, porque como digo, el 31 de diciembre es una fecha aleatoria, nada cambia.
Así que para este 2010, con dos cojones bien gordos, y con la cabeza bien alta, a seguir pa alante, que lo que tenga que venir vendrá, y lo que tenga que irse se irá.
Y como no, concluir con algo nunca visto, dando las gracias a los que han estado ahí en algún momento (incluídas las tortuguitas), porque entre todos (donde me incluyo a mí mismo, porque sin fuerza de voluntad y coraje no vas a ninguna parte) sigo viviendo.
Felices fiestas, y recordad, nos vemos el 13 de julio.