sábado, 7 de noviembre de 2009

Última llamada.

Sólo tenía una moneda en el bolsillo, y sólo había una cabina a su disposición. No obstante decidió no gastarla. No consideró importante esa llamada.

Ya volvería a encontrarse con otra cabina en cualquier otro lugar.


Sin embargo, por la paradójica e inexplicable vida, con su fortuna y desgracia repartidas de esa manera tan peculiar, llamadas por unos suerte, por otros destino y por una mayoría cada vez más minoritaria obra de dios, no vio más cabinas.

¿Compensaba conservar esa moneda?


(Yo no creo que compense, pero es únicamente mi opinión.)

------------------------------------------------------------------------------------------

Al anochecer llegaron los jinetes del apocalipsis, dispuestos a llevárselo. En un momento de desesperación, le dio la moneda a uno de ellos.

No hice esa última llamada, no me llevéis.

Y no le llevaron. Se quedaron con esa moneda.

Al día siguiente se encontró con una cabina.


En el cristal, colocado en su interior pero de modo que fuese visible para el exterior, había un cartel. Aparentemente, y eso les parecía a todos los ciegos que pasaban por allí y miraban al cartel, era una simple nota de "teléfono averiado".

Pero la persona que ya no tenía ninguna moneda se paró y lo leyó atentamente. Ponía "Sé lo que hicisteis".

Sí, en plural.
__________________________________________________________


Y así casi 2 años xD... manda cojones.



PD: programa de cine de Juanka. "El secreto de sus ojos". Lo que debería haber sido un secreto es la existencia de la película, porque menudo montón de mierda infumable. Y hasta aquí mi programa de cine.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo no he entendido nada.

Olga dijo...

Neither do i :s

Anónimo dijo...

Bueno, yo no la he visto todavía así que no le puedo encontrar bien la gracia, xD.

Kuasas dijo...

No lo pillo.

Pero te acepto igual :D

Sandra dijo...

no pillo nada xDDD lo de la cabina me a descolocao.. DUERME POR FAVOR jaj
un beso amor mio :$:$ jajaj